lunes, 17 de septiembre de 2007
Buscando chamba en Acapulco.
Pecando de localista y actuando con una logica acapulqueña que me dice que puedo conseguir un trabajo digno y bien pagado en mi querido terruño, hojeo diarios para conseguir empleo de acuerdo a mis capacidades y conocimientos. Me encuentro con lo siguiente:
En el periódico de mayor circulación –autoproclamada- en el estado se encuentra la siguiente oferta de empleo:
• El 10% son puesto administrativos o personal contable.
• El 15% de vendedores.
• El 7% de servicios varios.
• Computación solicita el 3% del total de empleos.
• Meseros, cocineros y similares, el 8 %
• Varios, que incluyen desde operadores de maquinaria a mensajeros, peones y otros, el 27%.
• Servicios de masajes, compañía femenina o masculina y chicas calientes varios, 30%.
Se confirma lo que siempre ha sido obvio: Acapulco vive principalmente de proporcionar diversión a sus visitantes, por pocos y poco pudientes que éstos sean. La falta de otra actividad diferente al turismo impide que se diversifique la oferta de empleos y los que quieren resolver su situación económica lo hacen vendiendo o queriendo vender lo único que les queda: su tierra o su carne.
Los más afortunados, quizá, invirtiendo en algo seguro. De ahí tantas gasolineras, pues el combustible con tantos taxis y camiones urbanos se debe seguir vendiendo, pues lleven o no pasaje de cualquier manera consumen combustible. O mejor aún, el último grito de la moda en inversiones en Acapulco, los únicos negocios que se han multiplicado -.además de las narcotiendas- de manera notable: las casas de empeño. En un supremo acto de autofagia social, los que tienen se ocupan de quitar a los que poco tienen lo muy poco que les queda, pues el préstamo por las alhajas de la abuelita es minimo, y al no resolver nada condena a la pérdida del recuerdo familiar guardado por varias generaciones. Y después que.
Como alguna vez le pregunte a una candidata a alcalde por parte del partido amarillo cuando en una reunión llegó a deslumbrar a los presentes diciéndonos que iba a crear empleos dignos y bien pagados para todos los acapulqueños “si llegaba…” a la ansiada silla.
¿Como, -le pregunté-. cómo se propone Ud “generar” empleos que compitan en disponibilidad y buen pago contra la oferta que actualmente y sin tanto cacareo han traído a la ciudad la venta de drogas a menudeo y la prostitución a todos los niveles? Niñas y niños, jovencitas y jovencitos, que ofreciendo su humanidad recogen 3 o 4 veces lo que puede hacer en un mes un profesionista bien pagado y con un título que avala 4 o 5 años de estudios. Jovencitos que con arriesgarse en una noche venden lo que un obrero, albañil o mesero bien pagado no levantan en un par de meses.
El silencio siguió a mi pregunta y se prolonga para concluir con esta colaboración.
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1 comentario:
Hola Amigo;
Si te sirve de consuelo entérate que no solo en tu puerto existe la misma oferta de trabajo.
Un beso
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